INTRODUCCIÓN
En
este trabajo académico podemos ver que la filosofía de la mente se basa o se
ocupa de cuestiones relativas a los procesos mentales y su relación con el
cuerpo humano, sobre todo con el cerebro.
A través
de la filosofía podemos llegar a tener ciertos tipos de conductas que nos hacen
pensar acerca de ellas e incluso poder llegar a cambiar de opinión en ciertos aspectos y gracias a ello podemos ser
seres humanos más razonables.
DESARROLLO
La filosofía de la mente se ocupa de la naturaleza de los estados mentales,
de sus efectos y sus causas. La cuestión del comportamiento de los estados
mentales y físicos ocupa aquí un lugar central. Además de las cuestiones
ontológicas acerca de la naturaleza de los estados mentales, la filosofía de la
mente estudia cuestiones epistemológicas en torno a la cognoscibilidad de la
mente.
Argumentos en favor del dualismo
¿Se basa el dualismo únicamente en el abismo intuitivo entre lo mental y lo material? ¿O existen
argumentos concretos en favor del dualismo? El argumento más conocido es el
desarrollado por René Descartes en las Meditaciones. En resumen, es el
siguiente: Puedo imaginarme clara y distintamente que el espíritu exista sin la
materia. Lo que uno puede imaginar clara y distintamente es al menos, por
principio, posible. Así, pues, es al menos posible que el espíritu exista
sin la materia. Si es posible que el espíritu exista sin la materia, espíritu y
materia han de ser entidades diferentes. Puesto que espíritu y materia han de
ser entidades diferentes, en consecuencia el dualismo es cierto.
Las premisas del argumento pueden ponerse en duda. ¿Por qué, por ejemplo,
habría de ser algo posible sólo porque puede imaginarse clara y distintamente?
A pesar de problemas de este tipo, aún hoy en día se siguen defendiendo
variantes del argumento cartesiano, por ejemplo, Saúl Kripke. Las posiciones dualistas se vuelven más plausibles
por los problemas que plantea el materialismo que por sus propios argumentos
positivos.
Los argumentos en favor del dualismo son básicamente de carácter
epistemológico, aunque el dualismo encuentre también acogida por motivos
morales o religiosos; en realidad,
muchos ataques al dualismo pudieran estar inspirados
más en esta clase de motivos que en los primeros.
Otros dualismos. Existen también otras formas de dualismo, entre las que mencionaremos
las cuatro más importantes.
1) Paralelismo psicofísico: El paralelismo fue desarrollado por Gottfried Wilhelm Leibniz. Las tesis centrales son:
1.
Espíritu y materia son dos
sustancias diferentes.
2.
Dichas sustancias no interactúan
entre sí.
3.
Sino que actúan en paralelo, pero
de modo sincronizado.
De este modo se superarían
los problemas del dualismo interaccionista, pues ya no habría que buscar un
lugar en el cerebro donde se produjera la interacción. Sin embargo, este
planteamiento arroja nuevas preguntas. Si quiero ir al frigorífico (proceso
mental), normalmente voy al frigorífico (proceso físico). ¿Cómo puede ser que
entre mente y materia no se produzcan efectos recíprocos? El paralelismo
responde a esto que los sucesos mentales y materiales corren de forma paralela,
al igual que relojes sincronizados. Intuitivamente, parecería una casualidad
increíble que en todos los seres que experimentan fenómenos mentales la
maquinaria física corriera exactamente de forma paralela a dichos fenómenos,
pero Leibniz atribuyó la razón de ese paralelismo a la acción de Dios.
2) Ocasionalismo: El ocasionalismo ha sido defendido, entre
otros, por Nicolás. La idea es la
siguiente: cuando quiero hacer algo se está produciendo un suceso inmaterial en
mi espíritu. Dios conoce ese hecho y hace que el cuerpo se ponga en movimiento.
3) Epifenomenalismo: El epifenomenalismo entiende la
conexión entre mente y materia como una relación de un solo sentido: la materia
actúa sobre la mente inmaterial, pero no a la inversa. Sin embargo, el
epifenomenalismo plantea problemas similares a los del dualismo
interaccionista. ¿En qué lugar se produce el efecto sobre la mente? ¿Cómo se
produce dicho efecto? Todavía hoy hay defensores del epifenomenalismo. Uno de
ellos era, hasta hace poco, Frank
Jackson.
4) Dualismo de propiedades: El dualismo de propiedades
ha experimentado un renacimiento en los últimos años debido a un libro de David Chalmers.4 El dualismo de propiedades
puede incluirse entre los dualismos sólo con ciertas reservas. Al contrario que
los demás, con respecto a la sustancia es un monismo; es incluso compatible con
la tesis de que todo se compone de pequeñas partículas físicas. Sostiene, no
obstante, que hay propiedades no materiales. Chalmers califica a la propiedad
de "ser experimentado de determinada manera" (los qualia) de propiedad no material. Sus
reflexiones se apoyan en el concepto de superveniencia y en la lógica de las explicaciones
reductivas.
Respuestas monistas al problema mente-cuerpo
El monismo, en contraposición al
dualismo, afirma que sólo hay una substancia. Hoy en día casi todos los
monismos son materialistas. Así, pues, afirman que la única substancia
existente es la materia. No obstante, son posibles otras formulaciones: podría
también afirmarse que no hay materia, sino sólo espíritu. Tal monismo idealista
tiene pocos defensores en la actualidad. Una tercera posibilidad consiste en
suponer una substancia que no es ni materia ni espíritu. Lo mental y lo físico
serían propiedades de esa única substancia. Esta posición fue defendida por Baruch Spinoza y popularizada por Ernst Haeckel en el siglo XIX. Este monismo
se asemeja al dualismo de propiedades (V. más arriba). En lo que sigue nos
ocuparemos únicamente de los monismos materialistas clásicos.
Conductismo
El conductismo ha sido la corriente dominante en la filosofía de
la mente durante la primera mitad del siglo XX. En la psicología surgió como reacción al problema de la introspección: cuando mediante la introspección alguien habla de su
mundo mental interior, no hay manera (o no la había entonces) de comprobar la
veracidad de sus declaraciones. Pero sin posibilidad de verificación, dicen los
conductistas, no hay ciencia posible. ¿Cuál es la solución para la psicología?
Debería renunciar a ocuparse de la vida íntima mental y la introspección y, en
vez de eso, concentrarse en el comportamiento observable.
Paralelamente a estos desarrollos de la psicología fue surgiendo un
conductismo filosófico. Este se caracteriza por un verificacionismo que considera carentes de sentido las declaraciones
sobre la vida íntima mental que no pueden ser comprobadas. Sin embargo, ¿qué
son los estados mentales si no conforman una vida íntima mental de la que se
pueda dar cuenta mediante la introspección? Los conductistas responden: los
estados mentales son descripciones de la conducta o disposiciones.
El conductismo filosófico ha sufrido una decaída desde la última mitad del
siglo veinte, coincidiendo con el ascenso del cognoscitivismo. Los cognoscitivistas rechazan el conductismo debido a
varios problemas que consideran insostenibles. Por ejemplo, se puede pensar que
el conductismo es contra-intuitivo al afirmar que cuando alguien habla de sus
punzantes dolores de cabeza esté hablando de su conducta.
Teoría de la identidad
La teoría de la identidad, desarrollada por John Smart y Ullin T. Place,
fue la reacción al fracaso del conductismo. Si los estados mentales son algo
material, pero no conducta, habrá que suponer que son idénticos a los estados
físicos internos. De esto se sigue inmediatamente que un estado mental M no es
otra cosa que un estado cerebral C. El estado mental "deseo de un
café" no sería otra cosa que "la activación de determinadas neuronas
de determinadas regiones cerebrales".
La teoría de la identidad experimentó un impulso debido a los avances de la
neurociencia. Los actuales procedimientos de monitorización proporcionan nuevos
conocimientos acerca del funcionamiento del cerebro.
Pese a una cierta plausibilidad inicial, la teoría de la identidad tiene
que enfrentarse con al menos un serio problema, la realización múltiple, tal
como la formuló Hilary Putnam.6 Parece claro que no sólo los seres humanos,
sino también por ejemplo los anfibios, o los alienígenas si los hubiera, pueden
padecer dolores. Pero parece improbable que todos los seres con los mismos
dolores se encuentren en el mismo estado cerebral. Pero si no es ese el caso,
entonces el dolor no puede ser idéntico a un determinado estado cerebral. De
modo que la teoría de la identidad carece de fundamento empírico.
Incluso si sucediera que un determinado estado cerebral está ligado en cada
caso con un único estado "mental" de la persona, esta correlación
absoluta entre estado mental y estado cerebral no significaría necesariamente
que ambos estados son de hecho uno y el mismo.
Otro problema de la teoría de la identidad radica en que, ciertamente,
puede describir el "deseo de tomar un café" por medio de un
determinado estado cerebral; sin embargo, la declaración acerca del estado
cerebral sólo tiene significado si sabemos lo que significa sentir el deseo de
tomar un café. Así pues, un lenguaje neurocientífico sobre los procesos
mentales no puede prescindir del contenido semántico del lenguaje corriente,
que expresa tanto los procesos mentales como el deseo de tomar un café, y no
puede por tanto sustituirlo, como se pretende.
Pese a estos problemas, hoy en día se da un cierto renacimiento de la
teoría de la identidad, debido sobre todo a Jaegwon Kim.
Aquí podemos ver un esquema del funcionamiento de la mente a grandes
rasgos.
Informática
La informática se ocupa del
procesamiento automático de informaciones (o al menos de sistemas
físicos de símbolos a los que se asigna información), tal como hacen las computadoras. Desde su comienzo, las
computadoras han sido capaces de desarrollar acciones para las que una persona
necesita su mente. Un ejemplo es la multiplicación. Pero está claro que las
computadoras no utilizan una mente para multiplicar. ¿Podrían, no obstante,
llegar algún día a tener una mente? Esta pregunta ha experimentado un enorme
impulso con las investigaciones en el campo de la inteligencia artificial (IA).
En la IA hay que distinguir entre un programa
de investigación modesto y otro más ambicioso: es la distinción de John Searle entre la IA débil y la fuerte.
La IA débil tiene por único objetivo simular estados mentales, sin pretender
por ello que las computadoras tengan realmente conciencia, etc. El objetivo de
la IA fuerte, por el contrario, es una computadora con conciencia. La IA fuerte
se remonta al pionero de la computación Alan Turing. Como respuesta a la pregunta "¿Pueden
pensar las computadoras?" él formuló el célebre test de Turing. Turing pensaba que una computadora
podría pensar cuando en un "chat" fuera indistinguible de una
persona. El test de Turing ha recibido muchas críticas, entre otros de John
Searle, con su experimento mental de la "habitación china". Por lo demás, queda aún sin respuesta
la pregunta acerca de una posible sensibilidad (qualia) de las computadoras o
robots. En este punto la mayoría de los informáticos son poco optimistas.
Algunos científicos del campo de la
informática creen en la actualidad que su especialidad puede aportar una nueva
contribución al problema mente-cuerpo. Suponen que a partir de la acción
recíproca entresoftware y hardware, que se produce en toda
computadora, es posible que algún día se puedan descubrir teorías que nos
ayuden a comprender la acción recíproca entre la mente humana y el cerebro.
Psicología
La psicología es la ciencia que
investiga directamente la conducta y los procesos mentales. Investiga en
concreto estados mentales como la alegría, el temor o las obsesiones. La
psicología investiga ahí las leyes que ligan los estados mentales entre sí o con
el input y output de las personas.
Ejemplos de esto nos los proporciona,
por ejemplo, la psicología de la percepción. Esta ha descubierto
principios generales de la percepción de las formas. Una ley de la psicología de
la forma dice: los objetos que se mueven en el mismo sentido se perciben como
relacionados entre sí. Esta ley describe una relación entre el input visual y los estados perceptivos
mentales. No obstante, esto no dice aún nada acerca de la naturaleza de los
estados perceptivos. Las leyes descubiertas por la psicología son compatibles
con todas las respuestas al problema mente-cuerpo ya descritas.
CONCLUSIÓN
La filosofía analiza el
lugar que el hombre ocupa en el universo y la naturaleza, los instrumentos,
procesos y objetos de su pensamiento, los valores a que debe atenerse en su
relación con otros hombres y con la sociedad humana.
La filosofía, básicamente, es un conjunto
infinito de preguntas e ideas que te ponen a pensar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario